Uno de los secretos mejor guardados de Pierre de Frédy, Baron de Coubertin, el moderno restaurador de los Juegos Olímpicos, era su escudo de armas: en campo de azur, un tenedor de plata muy pequeño muy pequeño; un cubertín.
sábado, 15 de mayo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario